10 consejos de una chef eco-responsable
Ser chef eco-responsable, para mí, es hacer lo mejor que puedo con lo que tengo disponible, reconociendo que cada persona tiene circunstancias diferentes y que no existe una sola forma correcta.
Como inmigrante viviendo en el campo en Francia y habiendo trabajado en restaurantes, puedo elegir más fácilmente a quién comprarle y qué comprar.
Aquí te van 10 consejos de una chef eco-responsable que puedes adaptar a tu contexto:
1. Siempre hay algo que aprender 📚🍽️
En cocina, como en todos los oficios, nunca terminamos de aprender.
Me gusta conocer la historia de los ingredientes, aunque entiendo que no siempre es fácil conseguir esta información. Cuando puedo, pregunto o investigo sobre el origen y las prácticas de cultivo.
Si algo no me convence y tengo alternativas disponibles y accesibles, trato de elegir diferente. Pero reconozco que a veces las opciones están limitadas por presupuesto, tiempo o disponibilidad.
2. Privilegio los Productos Locales y de Temporada 🌿
Vivir en el campo me da acceso a granjas y productos locales. He aprendido adaptar mis gustos a lo que hay en cada estación. Sigo añorando los nopales, el aguacate y todas las frutas y verduras de México pero he ido aprendiendo a cocinar con lo que consigo aquí.
Los productos locales y de temporada tienen un menor impacto socio-ambiental porque apoyo al comercio local y evito transporte.
3. Me Intereso por la salud y satisfacción de l@s Comensales 🍽️💚
Mi responsabilidad no solo es servir comida rica, sino también saludable. Como no soy nutrióloga, me ha servido informarme con especialistas y en libros. Si tienes dudas o preguntas acerca del equilibrio alimentario, te aconsejo que te acerques a una persona especializada en el tema.
No se trata solo de “llenar la panza”, sino de ofrecer un menú equilibrado que sacie de manera justa, sin excesos ni desperdicios.
4. Creo Lazos con Agricultores y Proveedores Locales 🧑🏽🌾 🤝🏽
Evito lo más posible comprar en supermercados y en tiendas que venden grandes formatos.
Las personas que producen nuestros alimentos son especialistas en sus productos. ¿Quién mejor que ellas para recomendarnos lo que es de temporada, lo que está más maduro e incluso cómo cocinar algo que no conocemos?
5. Evito Desperdicios y Soy Creativa con los Restos ♻️🥕
En mi cocina trato de aprovechar todo lo que puedo: Uso las cáscaras para hacer fondos de verduras, el pan duro lo transformo en crutones o pan molido para empanizar.
Lo que más me ha ayudado para evitar el desperdicio es planear pero sin caer en la exageración. Hago un menú semanal con un par de huequitos para que entren salidas o imprevistos.
Por otro lado, hice la paz con el hecho de comer varias veces lo mismo y me hice amiga del congelador.
6. Optar por Técnicas Sostenibles y Sin Plásticos 🚫🍴
Ciertas técnicas culinarias pueden generar un exceso de consumo de energía y desperdicios.
Si prendo el horno, trato de optimizar su uso y cocinar varias cosas.
Evito los plásticos de un solo uso, y he tratado de equiparme con utensilios duraderos.
Con los años, he logrado que mi cocina esté libre de film plástico, papel aluminio y productos desechables.
7. Utilizo Productos Eco-Responsables para Seguridad e Higiene🧴🌍
Aunque el respeto al medio ambiente es clave, la seguridad alimentaria es prioridad. Uso productos sin tóxicos especiales para cocina.
8. Respeto los parámetros Alimentarios de l@s Comensales 🌱🥦
Cada persona tiene sus propios parámetros alimentarios. Si cocino para otras personas, me esfuerzo por ofrecer opciones que respeten la diversidad y necesidades particulares.
Ya sea por alergias, intolerancias o preferencias personales, me gusta que la gente se sienta satisfecha y segura cuando consume lo que preparo.
9. Cocinar desde el respeto a los productos 💫
Para mí, cada ingrediente tiene su esencia. Uno de mis objetivos como chef eco-responsable es respetar esa esencia, resaltando sus propiedades nutricionales y gustativas sin alterar su naturaleza.
10. Opto por productos frescos y libres de empaques📦
En la medida de lo posible, evito productos empacados e importados.
En mi cocina, lo que viene de lejos son especias y chiles que suelo comprar a granel, y se conservan muy bien en frascos herméticos. Incluso comparto con amig@s y otr@s chefs, juntamos pedidos y privilegiamos proveedores comprometidos con el comercio justo.
Ser una chef eco-responsable es un compromiso diario con el planeta, la salud y el bienestar de l@s comensales. Es un esfuerzo que aboga por un futuro más sostenible, donde cada plato tenga un menor impacto socio-ambiental.